Una pequeña traición.

En realidad últimamente no levanto mucho la cabeza. No sé si soy una niña consentida que llora cuando le quitan algo prestado, nunca voy a poder tener enteramente a mi padre, siempre la va a querer a ella.
Hoy mi hermana me decia, afrontalo, nos quiere, pero a ella más. ¿Tengo que afrontarlo? ¿Es justo?
Yo pensaba que tener un hijo era un regalo si en realidad querias tenerlos. Creo que si tuviera que tomarme en serio esa frase de mi hermana, no estaría aquí, estaría huyendo como siempre... .
Hay pocas cosas, que me hacen aferrarme a un sitio o a una persona, muy pocas pero una de ellas es su necesidad. El problema es que desde pequeña he tenido una dependencia sobrenatural hacia mi padre, papitis, o algo así y gracias a mi orgullo, nunca lo he podido ver hacer una de sus costumbres más típicas, arrastrarse sin tener culpa.
Sólo he afrontado que ella se quiere a ella misma más que nadie, pero no puedo afrontar que mi padre haga eso, porque todavía lo considero mi padre.
El caso es, que como bien he dicho, lo puedo llegar a dar todo por él, y si no lo hago.. me siento mal y vuelve mi insomnio; pero no todo es tan bonito, a veces no merece la pena ayudar, porque sabe lo mucho que le quiero... y aun así arriesgando todo lo que arriesgo, por un te quiero suyo, cambia a sus hijos aun que ella no le haya cuidado en su enfermedad. Le da igual ¿Se puede amar tanto? Eso no es amor, es dependencia.
Ayer paso, volvió a hacerlo, se humilló, delante mio, cuando supuestamente iba a superarlo ¿Cómo me tengo que sentir?

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